Pocas
veces le es dado a un ser humano (hombre o mujer) la posibilidad de pasar a los
anales de la historia por mor del descubrimiento de un nuevo continente, una
nueva peste, una nueva tendencia de la moda o el último elemento de la tabla
periódica de Dmitri
Mendeléyev.
Más accesible y cercano al nivel
en que nos movemos los comunes que integramos el FILANDÓN está en nuestra mano
la creación de un neologismo necesario; palabra inexistente por pasar
inadvertido hasta ese momento el concepto o la idea que define, reclama y
formaliza.
Creo que me ha llegado ese
momento en que la Fama, con sus trompetas llama a mi humilde umbral.
Propongo, por absolutamente necesario el neologismo: TAXONOMANÍA. En primer lugar, no debe
ser confundido en virtud de su cercanía fonética con taxonomía (que ya se
encuentra en el diccionario de la RAE, cuya etimología es clara: del gr. τάξις táxis 'ordenación'
y -nomía. Con casi los mismos
mimbres, cambiando – nomía por –manía, tendremos mí palabra.
Una
vez creada, por virtud del uso libérrimo del hablante español para suplir un
concepto que existe y que permanece innombrado, propongo la siguiente definición,
que indudablemente ofrezco gratis et amore a los sesudos miembros de la
Academia:
-
taxonomanía
-
Del gr. τάξις táxis 'ordenación'
y μανία -manía '-manía'.
-
1. f. Med. Desmedido afán clasificatorio. Placer
patológico por las clasificaciones y listas ordenadas.
5 de agosto del año
del Señor de 2018