"Su raíz «parece útil a los hechizos», y tiene muy variadas virtudes, y los consiguientes riesgos. Combate la flema y la melancolía, calma el dolor, produce sueño (y aun la mudez, la locura y la muerte); médicos y cirujanos la aplican como anestésico para cauterizar y cortar, o simplemente para tratar las llagas, la irritación de los ojos y el mal de madre (de ahí se pasa a otras aplicaciones ginecológicas). Por añadidura, ya se sabe que la forma de esa raíz tiene un inquietante parecido con la del cuerpo humano; es como la de un hombre en miniatura, y sus razones tuvo Pitágoras para dar a la tal planta el nombre de anthropomorphon. Pero hay burladores que «para engañar al pueblo ignorante» tallan las raíces de la mandrágora, les insertan granos de trigo, las ponen bajo tierra y, así, logran que broten de ellas «hierbas» a modo de barbas y pelo, «y estonces las sacan como cosa monstruosa, y las venden por cuanto quieren, para hazer hijos a unas mujercillas estériles, que mueren por empreñarse».
sábado, 23 de abril de 2022
REPRODUCCIÓN ASISTIDA
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Che, nada nuevo bajo el sol.
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