miércoles, 21 de septiembre de 2022

VENTAJAS DE LA ENFERMEDAD

Epístola XVI

Antonio de Guevara, obispo de Mondoñedo, 
al Duque de Alba Don Fadrique de Toledo. (1524)

Vuestra Señoría me escribe que también ha estado malo, y que da todo su mal por bien empleado, así por verse sano, como por estar con un santo propósito de irse á la mano al pecar, y de abstenerse del comer. Á mí, señor, me pesa de corazón que hayáis estado malo, y pláceme mucho, y muy mucho, que estéis dese buen propósito; aunque es verdad que holgaría más de véroslo cumplir, que no de oiroslo prometer; porque los infiernos están llenos de buenos deseos, y el paraíso está lleno de buenas obras. Sea lo que fuere, que para mí no hay cosa en que más conozca ser un hombre cuerdo ó no, que es verle cómo se vale en la adversidad, y cómo se aprovecha de la enfermedad. No hay igual locura con emplear mal la salud, ni hay igual cordura con sacar algún fruto de la enfermedad. Cum infirmior, tunc fortior sum. Decía el Apóstol, que cuando estaba enfermo, entonces estaba más recio; y esto decía él, porque al enfermo ni le hincha soberbia, ni combate lujuria, ni le derrueca avaricia, ni le molesta envidia, ni le altera ira, ni le sojuzga gula, ni le descuida pereza, ni aun le desvelan pundonores de honra. ¡Pluguiese á Dios, Sr. Duque, que tales fuésemos sanos, cuales prometimos de ser cuando estábamos enfermos!


 

viernes, 9 de septiembre de 2022

DIETA FRUGAL Y ORTODOXA

La ciencia sabe que la obesidad es multicausal. Y la humanidad sabe que en guerras, sequías, sitios y carestías las personas adelgazan. Comer poco ayuda a perder peso, ser frugal. Aquí tendríamos un ejemplo: la cena servida por unos monjes ortodoxos del monte Athos a Pedro de Urdemalas, cristiano que huyendo de la esclavitud en la Constantinopla otomana fa en esta península sacra.


PEDRO. No hubo fruta de prinçipio ninguna. 

MATA. Ni aun de medio creo yo.

PEDRO. La principal cosa que sacaron fue habas remojadas de la noche antes en agua fría y con unos granos de sal encima, sin moler, tan grandes como ellas, y tras esto un plato de azitunas sin aceite ni vinagre, que yo quando las vi pensé çierto que fuesen píldoras de cabras, porque no eran mayores; añadieron por los huéspedes terçero plato, que fue media cebolla.

JUAN. ¿Y ansí comen siempre?

MATA. —Que son mañas de fraires quando hay huéspedes forasteros, por comprobar la pobreza que tienen predicada; mas entre sí y'os prometo que lo pasan bien y tienen alguna razón, porque luego les acortarían las limosnas por la fama que los huéspedes les darían.

PEDRO. De los de acá yo bien creo lo que vos deçís, mas de aquéllos no, porque lo sè muy bien que hazen la mayor abstinençia del mundo siguiendo siempre ellos y los clérigos griegos la orden evangélica. Llegamos de allí en el primer monasterio de Monte Sancto yendo por una espesura muy grande, que es de esclabones 4¹, que allá se llaman búlgaros, y el nombre del monesterio Chilandari; y en llegando estaban unos fraires sentados á la puerta de la portería, y encima de todas las puertas hay una imagen de Nuestra Señora, a la qual los que van en romería han de hazer primero oratión que hablen a nadie, y en esto tienen grande scrúpulo. Yo, como no sabía aquello, en viendo los fraires los saludé con el grande plazer que tenía, pensando hallar la charidad y acogimiento que en Burgos. Ellos respondieron: Bre ¿ti camis? 
 padre ¿qué hazéis señalándome la imagen. Yo luego caí en la quenta, y hize mi oratión como ellos usan.




Bre ¿ti camis? es poé, tí xaμɛíç cuya hacéis?».

l
Viaje de Turquía, 273

domingo, 4 de septiembre de 2022

LOS HIJOS, SIEMPRE LOS HIJOS ...


Volvemos de vacaciones más cansados que cuando partimos. Normal, canónico. 
Me atrevo hoy, inicio de muchos cursos escolares, a ofreceros las reflexiones de San Agustín, obispo norteafricano de Hipona, sobre su infancia y los esfuerzos de sus padres en su educación retórica. Lo leemos en sus magníficas y tiernas Confesiones (año 394).
No consta la inflación en aquellos romanos años imperiales. 
Salud. Vale.





LIBRO II
CAPÍTULO III

Del viaje que hizo a Cartago para continuar allí sus estudios 
y de los intentos de sus padres en orden a esto mismo.


En aquel año (369) se habían interrumpido mis estudios, porque habiendo yo vuelto de Madauro, ciudad que estaba cerca de Tagaste, en la cual había estado aprendiendo letras humanas y la retórica, en este tiempo intermedio se iban juntando y previniendo los caudales necesarios para enviarme a continuar mis estudios a la ciudad de Cartago, que estaba mucho más lejos, lo cual se intentó y efectuó más por animosa resolución de mi padre, que por la abundancia de sus riquezas, pues él era un vecino de Tagaste cuyas facultades y hacienda eran bien cortas...

...¿Quién había que entonces no llenase de elogios a mi padre, porque con unas expensas superiores a su hacienda me daba cuanto fuese necesario para ir a continuar los estudios tan lejos de mi patria, cuando se veía que otros ciudadanos mucho más ricos que mi padre no cuidaban de ejecutar otro tanto con sus hijos? Ni tampoco mi padre cuidaba de que yo adelantase en vuestro santo temor y servicio, ni de que viviese castamente, con tal que cultivase la elocuencia y me hiciese discreto y culto, aunque el campo de mi corazón, de quien Vos, Dios mío, sois el único, legítimo y verdadero dueño, estuviese desierto y sin cultivo.


Jebba infantil tradicional tunecina